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Cuidado del pie en personas con diabetes

El pie diabético es una de las complicaciones que puede tener una persona con diabetes. El cuidado del pie en personas con diabetes es esencial para garantizar su salud. En COPOMUR queremos hablaros de ello ¡Sigue leyendo!

Cuidado del pie en personas con diabetes

La piel de las personas que sufren diabetes tienden a sufrir alteraciones en la barrera cutánea, sequedad, picores e incluso infecciones. La mayoría de los problemas en los pies que afectan a las personas con diabetes, surgen a raíz de dos complicaciones serias en esta enfermedad: mala circulación de la sangre y daño en los nervios. Este daño causa entumecimiento y reducción en la sensibilidad del pie.

Es muy importante cuidar los pies y observarlos a diario para controlar cualquier pequeña rozadura, grieta, enrojecimiento o herida en el pie. Hay seis puntos que deben controlarse para garantizar la salud del pie: la punta del dedo gordo, la base de los dedos pequeños y medianos, el talón, la parte exterior del pie y la planta.

Cualquier ampolla o herida en los pies, por pequeña que sea, puede convertirse en un problema si se desarrolla una infección, úlcera del pie diabético o no se curan. Tener una úlcera en el pie es motivo suficiente para ir al hospital, esto puede suponer desde la hospitalización del paciente hasta la amputación. El cuidado del pie es esencial para prevenir y evitar cualquier problema grave en la persona diabética.

Higiene

Los pies deben mantenerse limpios, por ello, es muy importante lavarlos a diario. Hay que lavarlos con agua tibia y jabón suave, ya que los jabones fuertes pueden dañar la piel. Primero es aconsejable tomar la temperatura del agua con su mano, ya que puede que la sensibilidad del pie no le permita percibir si la temperatura es demasiado caliente. No frotar, hacer un lavado suave  y sin dejar los pies en remojo.

A la hora de secar los pies hay que ser muy minucioso y eliminar muy bien la humedad. La mejor forma de hacerlo es por contacto, mediante golpecitos con la toalla, evitando la fricción y prestando mucha atención a las zonas interdigitales.

Hidratación

Después de la higiene diaria debemos aplicar crema hidratantes específica en el talón, dorso y planta de ambos pies para evitar la sequedad de la piel. No pongas crema hidratante entre los dedos de los pies.  Con la hidratación evitamos la piel seca, las grietas y además evita el riesgo de infecciones.

Cuidado de las uñas

Las uñas deben controlarse y cuidarse también, ya que tienen una función de protección, deben sobresalir 1 o 2 mm por delante del pulpejo del dedo. Es muy importante que el corte de las uñas sea recto, sin redondear.  Se deben utilizar tijeras de punta roma, no usar tijeras de punta afilada, cortaúñas u otros objetos punzantes, y después pasar una lima de cartón. Es recomendable mojar un poco los pies para que las uñas estén un poco más blandas y sea más fácil su corte, todo ello, con buena luz y sirviéndose de la ayuda de una lupa o espejo, si es necesario. Siempre que no se puedan realizar este tipo de cuidados con la precisión que requieren, es recomendable acudir al podólogo.

Calzado adecuado

Es necesario utilizar zapatos de piel que sean cómodos y amplios. Conviene que el calzado proporcione una buena sujeción, que se ajuste bien al pie, sin que quede demasiado holgado, ni haya presión. La presión en los pies a causa del calzado en personas con diabetes puede producir la aparición de úlceras en el pie. Es muy importante que el zapato garantice la adecuada protección del pie, por lo que debemos revisar el interior del calzado con frecuencia, metiendo la mano y comprobando que el interior está intacto y no presenta roturas ni nada, esto podría causar rozaduras o lesiones.

 

PIE DIABETICO

Cuando acudir al podólogo

Ante cualquier signo que detectemos en el pie, debemos acudir al podólogo, para que pueda inspeccionar, dar un diagnóstico y establecer un tratamiento en el menor tiempo posible para que la lesión no sea más grave. Si encontramos alguna callosidad, debemos acudir a nuestro podólogo, evitando los anti-callicidas o cremas milagro. Siempre debe tratar los problemas del pie un podólogo colegiado.

Es muy importante, tener un seguimiento adecuado de la salud de nuestro pie, especialmente cuando se padece diabetes. Y debe acudir especialmente si detecta enrojecimiento, hinchazón, sensación de calor, ampollas, hendiduras, hormigueo o dolor. Es muy importante llevar un correcto control del estado de salud de nuestros pies.

 

Y es que, para conseguir una buena salud del pie, es importante consultar a un podólogo. Si quieres ver más noticias como esta te invitamos a visitar nuestra página web o seguirnos en redes sociales (Facebook, Instagram, Twitter y Linkedin).

 

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