El pie de atleta es una de las patologías del pie más comunes y en COPOMUR os queremos contar en qué consiste y cómo prevenirlo ¡Sigue leyendo!
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Pie de atleta
La Tinea Pedis o pie de atleta es una infección dérmica por hongos que suele ser fácil de detectar debido al mal olor, la descamación y las molestias. Esta infección se puede expandir a lo largo de la zona plantar, incluso afectar a ambos pies. Sin embargo, suele iniciarse en la zona entre los dedos del pie. En caso de detectar cualquier anomalía en el pie o picor, se debe acudir inmediatamente a un podólogo que pueda evaluar, diagnosticar y tratar la afección.
El pie de atleta es una patología típica de los deportistas o montañeros, debido al exceso de humedad que se acumula en el calzado debido al esfuerzo o actividad física. Sus síntomas son:
- Molestias en el pie.
- Picor.
- Descamación entre los dedos de los pies.
Si detectas cualquiera de estos síntomas debes acudir lo antes posible al podólogo para iniciar el tratamiento, ya que al tratarse de una infección por hongos puede propagarse y ocasionar más molestias y problemas en el pie. Existen distintas cepas que pueden afectar a una zona u otra del pie, pese a que puede llegar a extenderse por todo el pie si no se trata. Estos tipos de cepas son:
- Tinea Pedis interdigital, es la más común de todas y se localiza en la zona interdigital de uno o todos los dedos, se caracteriza por su mal olor.
- Tinea Pedis Mocasín o dermatofitosis, aparece en la zona plantar y se caracteriza por la descamación de la piel.
- Tinea Pedis inflamatoria, se caracteriza por un olor muy fuerte, más que la interdigital y por la aparición de pápulas pequeñas en la cara interna del pie o en la planta del pie.
- Tinea Pedis ulcerativa, se localiza también en la zona interdigital y se suelen apreciar lesiones más profundas, con más humedad y exudativas.
Consejos para prevenir el pie de atleta
Es fundamental cuidar diariamente nuestros pies, especialmente controlar la humedad en esta zona. Las altas temperaturas y la humedad son un foco de cultivo para muchos microorganismos, entre ellos la Tinea Pedis. Con los cuidados adecuados se puede prevenir el contagio o aparición de esta infección por hongos, aquí os dejamos algunos consejos para prevenirla:
- Lo más importante es tener una buena higiene en los pies. Lavar, secar bien, hidratar, acudir a las revisiones con el podólogo, son cuidados que debemos cumplir para tener una buena salud de nuestros pies. Cuando lavamos los pies debemos prestar determinada atención a la zona interdigital del pie y lavar con cuidado con agua y jabón a diario.
- Secar adecuadamente los pies, debemos lavar detenidamente todas las zonas del pie, secarlo adecuadamente es fundamental. Después del baño, secar despacio y cuidadosamente todas las partes del pie, especialmente entre los dedos evitando que se queden restos de humedad.
- Evitar ir descalzo en zonas comunes, cuando practicas alguna actividad física en gimnasios o piscinas, es aconsejable evitar ir descalzo en las zonas comunes como vestuarios, zonas de baño o duchas, ya que los hongos son infecciones muy contagiosas y que suelen acumularse en este tipo de sitios.
- Calzado transpirable, el exceso de sudoración en los pies es un imán para los hongos y otras bacterias y microorganismos. Debemos apostar por el uso de calzado de piel, de calidad y especialmente que permita la transpiración del pie.
- Calcetines de algodón, igual que sucede con los zapatos, otro factor que influye en el exceso de sudoración del pie es el uso de calcetines de materiales no transpirables. El algodón es una fibra natural que no solo da comodidad sino que permite la transpiración del pie. Aún así, es recomendable sacar y cambiar los calcetines al llegar a casa o finalizar la actividad física.
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